Delicias Literarias #2 Galletas de mantequilla para bebé

En esta ocasión traemos una receta de lo mas dulce, tanto por su sabor, como por su temática. Por no olvidarnos del libro en el que nos hemos inspirado, Buenas Vibraciones de Lisa Kleypas. 

Cuando la hermana de Ella Varner le dejó un precioso bebé, Luke, para que ella lo cuidara porque ella no se sentía capaz, su primera reacción fue ir a buscar al padre de Luke para que se hiciera responsable de su paternidad. Eso le llevo a la puerta de Jack Travis, uno de los solteros más codiciados de Texas.

Nuestra primera reacción habría sido diferente, nosotras nos habríamos ido de cabeza a hacer galletas, así que aquí comparto con vosotras esta receta tan cuqui.

Nos perdonareis por el hecho de que el bebé de el libro sea un niño y hayamos hecho las galletas rosas, pero las hice para una nenita que ha nacido hace nada. Vosotras intentad imaginároslas celeste.

Ingredientes:

Para 15 galletas aproximadamente (dependerá del tamaño de las galletas)

• 250 gramos de mantequilla
• 175 gramos de azúcar
• 1 huevo y una yema
• 550 gramos de harina
• 1 cucharada de extracto de vainilla
• Fondant

Antes de nada quiero haceros una aclaración, que os vale para esta receta y para otras. Veréis en algunas recetas aparatejos que puede ser que no tengáis, no desesperéis, ya os iré diciendo que es imprescincbible y que no. En este caso en concreto veréis mi amasadora, que es muy útil y que yo adoro, pero podréis obtener el mismo resultado con un bol, un tenedor y vuestras manitas.

Ponemos la mantequilla (nada de margarina, ni mantequilla light, ni nada de eso) a temperatura ambiente (que este blandita) en un bol junto con el azúcar y lo mezclamos hasta que ambos ingredientes se hayan integrado y nos haya quedado con una textura cremosa. A continuación le añadimos el extracto de vainilla y los huecos un poco batidos, y volvemos a mezclar hasta que tengamos una mezcla homogénea. En este paso es posible que creáis que la mezcla se os ha cortado, pero no desesperéis, al añadir la harina volverá a coger la consistencia adecuada. Es el turno de la harina, que tendremos que ir incorporando poco a poco, cuando ya no podáis integrarla con el tenedor es momento de pasarla a la mesa y amasar con las manos, hasta que tengáis una masa nada pegajosa, y fácil de trabajar.

En este momento cortamos la masa en dos partes iguales, y la estiraremos con un rodillo entre dos papeles de horno hasta que quede aproximadamente con un grosor de ente 6 a 8 mm . Para que la galleta quede lo mas igualada posible, yo lo que hago es usar dos listones de madera como topes, una vez que el rodillo corra sin estirar la masa sabremos que está estirado correctamente. 

Metemos las planchas de masa en la nevera, en una superficie totalmente plana durante dos horas. Una vez pasado este tiempo, las sacaremos y con el cortador que hayamos elegido formaremos la galleta. Las pondremos en una bandeja de horno y las hornearemos a 180ºC durante 8 o 10 minutos. Exactamente deberemos sacarlas del horno cuando los bordes de la galleta empiecen a dorarse.

Cuando las saquemos del horno deberemos dejarlas durante 10 minutos en la bandeja del horno, y después dejarlas enfriar completamente en una rejilla. Para conservarlas frescas lo mejor es meterlas en un tupperware bien tapaditas.

Y ahora toca lo mas divertido, decorar las galletas. En esta ocasión yo decidí hacerlas como una camiseta y un monito, pero aquí ya cada uno puede echar a volar su imaginación. Lo primero que tenemos que hacer será teñir el fondant (o comprarlo directamente ya de color) 

Y ya después vamos cortando las distintas partes de la galletas y las vamos pegando con un pincelito mojado en agua.

Yo decidí ponerle unos tirantitos, con unos botoncitos blancos, y unas blonditas rosas en el cuello y las manguitas. y ya tenemos unas galletas deliciosas y muy vistosas para regalar ante la llegada de un bebé muy especial.

Reseña del libro: Romance Contemporáneo y dos de sus reinas

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