No puedes ver una canción. La sientes. la bailas... Es la canción de David, y nadie excepto yo puede oirla. |
La autora ha decidido escribir estos dos libros como stand alone, pero no os recomiendo leer este libro sin leer TLoM, porque además de spoilearos perderéis parte de los motivos que lleva a Tag a reaccionar como lo hace en algunos momentos, y sobre todo en mi opinión perderéis también de donde viene esa conexión entre Moses y David. Dicho esto también tengo que deciros que aun así creo que Amy ha conseguido que solo con este libro entiendas la historia a la perfección.
Ella decía que era como una canción. Su canción favorita. Una canción no es algo que puedas ver. Es algo que sientes, algo que te hace moverte, algo que desaparece después que se haya tocado la última nota.
Gané mi primera pelea cuando tenía once años, y he estado lanzando puñetazos desde entonces. Pelear es lo mas puro, verdadero y más elemental que existe. Algunas personas describen el cielo como un mar blanco interminable. Donde coros cantan y nuestros seres queridos nos esperan. Pero para mí, el cielo es otra cosa. Sonaba como la campana al inicio de un round, sabía a adrenalina, quemaba como el sudor en mis ojos y el fuego en mi barriga. Parecía como un borroso público que gritaba y un rival que quería mi sangre.
Para mi, el cielo era el octágono.
Hasta que conocí a Millie, y el cielo se convirtió en algo diferente. Me convertí en algo diferente. Supe que la quería cuando la vi perfectamente quieta en medio de la habitación llena de público, su perfecta postura firme, su barbilla alta, sus manos relajadas. Nadie parecía verla, excepto los que pasaban al lado de ella, que le lanzaban exasperadas miradas a su serio rostro. Cuando descubrían que no era normal huían. ¿Porque nadie la veía pero era lo único que yo podía ver?
Si el cielo era el octágono, entonces ella era mi ángel en el centro de el, la chica con el poder de derribarme y levantarme otra vez. La chica por la que quería luchar, la chica que quería reclamar. La chica que me enseño que a veces las batallas mas importantes son las que no creemos que podamos ganar.
Todo o nada. Eso es lo que soy. Y si voy a luchar, si me quedo, voy a tenerlo todo, durante el tiempo que pueda. |
Ella era de una nueva especie, una intoxicante mezcla de una chica familiar y completamente desconocida. |
En un momento bastante tranquilo de su ajetreada vida conoce a Millie, una bailarina erótica de su bar. Desde que la ve se da cuenta de que hay algo especial en ella, por su forma de moverse en la barra, con sus ojos cerrados, como si no le importara nada lo que los clientes pensaran de ella.
Si la vida de Tag no había sido fácil hasta ahora tampoco lo había sido la de Millie. Una enfermedad la dejó ciega cuando aún era una niña y quedó huérfana al morir su madre años después de que su padre los abandonara cuando ella quedó ciega. A su cargo tienen a Henry, un hermano un poco retraído obsesionado con las retransmisiones deportivas.
La vida no es perfecta, las personas no son perfectas, pero hay momentos que lo son. |
Cuando se conocen saltan chispas, y poco a poco sus vidas se van entrelazando irremediablemente, perfectamente conscientes de ello, pero sin querer afrontarlo por todo lo que ello conlleva. Todas las etapas de su relación son preciosas, desde una amistad divertida, con conversaciones ingeniosas, a necesitarse de una manera devastadora.
Pero como suele pasar casi siempre la vida se interpone en su relación y no siempre son capaces de tomar las decisiones mas adecuadas en cada momento.
La narración del libro está formulada de una forma bastante original. Como se conocieron y empezaron su relación esta contado desde el punto de vista de Tag, mediante una serie de cintas que ha grabado. En un momento hay un punto de inflexión en esta relación, y a partir de ahí la historia es contada por Moses. Pero ambas formas de narración se van intercalando, creando la necesidad de saber, y haciéndote formular teorías de lo que ha podido suceder.
No tienes que ganar, pero no puedes rendirte. Y tienes que dejarnos pelear contigo. |
En conclusión, Amy Harmon vuelve a conseguir otra historia llena de belleza y amor, como muy pocas autoras son capaces de ofrecernos.
Pertiguismo supremo aquí porque, claro, no he leído la otra novela... Os iba a preguntar si son para mí pero me decís que no lo son y luego me las arreáis en un reto y me las tengo que leer igual XDDDDDDD Alguna de esta mujer tendré que leer!
ResponderEliminarBesotes!
Quiero leer los dos libros, no sabéis lo que odio que no estén publicadas en nuestro país, ¿es que no se dan cuenta de lo que pierden?
ResponderEliminarBlogger se ríe de vosotras, programais la entrada para un día y la página haca caso omiso, muy fan de verdad XD.
¡Libro anotado!
El corrector del móvil hace lo que le da la gana -_-"
EliminarQue ganas de leer los dos libros estos.me llaman mucho la atención la historia que hay detrás tiene muy buena pinta...encima las portadas son preciosas.buen post como siempre.bss
ResponderEliminarJolines no hacéis más que provocarme ansias lectoras con libros guirigais! y como leo más despacio pues sumo a la to read a más velocidad de la que leo XDDD
ResponderEliminarDe esta mujer tenía otro apuntado y no recuerdo cual.... no se si es el otro que mencionas.... a saber pero bueno antes de leer algo ya me informaré bien para no leer desordenao :)
Muuuuaks ;-*****
¡Hola chicas! Estos dos los tengo apuntadísimos, así que, próximamente atacaré ;)
ResponderEliminarMadre mia, la Hamon no tenía más desgracias que añadir a los pobres protas, que crueldad xDDDD
ResponderEliminarPues después de leer Making faces veo que esta autora es de las que les gusta hacer reflexionar y ver el lado positivo de lo peor de la vida. Aún recuerdo a Bailey y todo su positivismo a pesar de lo injusta que la vida había sido con él. Veo claro por qué os gusta tanto esta autora. Cuando lo leí me recordó bastante al estilo de CoHo y sus historias profundas. Tendré en cuenta estos libros para más adelante :)